Esta obra se realizó durante la pandemia del covid 19. La pieza busca representar ese efecto de fractura y e incertidumbre que se vive en la rutina y cotidianidad en este periodo de alerta sanitaria. La carencia de recursos ha llevado a que todos debamos aceptar y adaptarnos a situaciones adversas a las que no estamos acostumbrados, ese esfuerzo por mantener el orden termina en un frustrado acto cortante y evidentemente forzado donde hay cierta identidad pero no la habitual, un recuerdo idealizado.. Hacer las mismas cosas de diferente manera crea una realidad alterada, es como ver tu reflejo en un espejo roto, eres tu, pero realmente es tu reflejo distorsionado y agredido, como nuestra nueva realidad, un presente fracturado.